Control parental.
En un mundo donde los niños y las niñas acceden a dispositivos móviles desde edades cada vez más tempranas, el control parental se ha vuelto más necesario que nunca. No se trata de espiar, sino de acompañar. Guiar el uso de la tecnología es hoy una forma de buscar el desarrollo de un pensamiento crítico.
Las plataformas digitales ofrecen entretenimiento, aprendizaje y comunicación, pero también riesgos: contenido inapropiado, sexting, ciberbullying, adicción a las pantallas o contactos con desconocidos. Sin límites claros, los menores pueden verse expuestos a experiencias que aún no están preparados para manejar.
El control parental, a través de herramientas digitales o normas familiares, permite establecer horarios, filtrar contenidos y supervisar la actividad en línea. No se trata de prohibir, sino de educar. Un control efectivo no sustituye al diálogo, lo complementa. Hablar con nuestros menores sobre lo que hacen en internet, interesarse por sus juegos y redes sociales, es tan importante como cualquier aplicación de seguridad.
Está en marcha un proyecto de ley para incluir en todos los dispositivos dirigidos a menores, este control parental, por lo que podría convertirse en imperativo legal.
Darle un móvil a un niño sin control parental es como dejarlo solo en una ciudad desconocida, de noche y sin mapa.

Esta presentación, Control Parental, y su guía didáctica han sido elaboradas en respuesta a la demanda de las familias del alumnado, especialmente del tercer ciclo de Educación Primaria, quienes han expresado su interés en este tema durante las tutorías, tanto individuales como grupales. Aunque se centra en este ciclo, está dirigida a todas las familias de Educación Primaria y también puede ser de utilidad para las familias de Educación Infantil y los primeros cursos de Educación Secundaria.
Anímate a poner en práctica este material de FND (Foro Nativos Digitales) en tus clases de Secundaria.


